Historias que se sirven en copa
Soy Soledad Figueroa, nací en el Ayuntamiento de Mos, un rincón tranquilo al lado de Vigo, en la provincia de Pontevedra. Desde siempre, mi pasión ha sido contar historias, por eso decidí estudiar periodismo en Santiago de Compostela, soñando con dar voz a lo que otros no veían.
Al terminar la carrera, busqué un medio pequeño, cercano a las personas y fue así como llegué a Valdeorras, para trabajar en un medio comarcal. Esa experiencia marcó el inicio de mi camino, porque me conecté con la gente y las tradiciones de Valdeorras… lugar que no estaba en mi mapa.
Poco después, me uní a delegaciones de medios gallegos y nacionales en la zona, como La Voz de Galicia y Onda Cero, donde llevé la radio comarcal durante 8 años. Me encantaba estar en contacto con las comunidades, escuchar sus historias y aprender de ellas.
Fue durante esos tiempos cuando empecé a adentrarme en el mundo del vino, haciendo cursos de sumillería y relacionándome con los bodegueros. Pero no era solo el vino lo que me atrapaba, sino todo lo que lo rodeaba: la historia, las tradiciones y el alma de una tierra que ha resistido el paso del tiempo.
Un día, Horacio Fernández Presa, conocido como el padre del Godello, compartió conmigo su historia sobre la recuperación de esta variedad de uva. Lo contaba con tanta pasión que me di cuenta de algo: estas historias merecían ser narradas al mundo. Y así, sin darme cuenta, nació en mi un nuevo anhelo y proyecto.
Decidí especializarme y comencé estudios superiores para certificarme como guía turística oficial de Galicia. Me hice autónoma y comencé a organizar visitas a bodegas. No había nada parecido en la zona, así que me propuse construir algo único. Investigué a fondo desde los romanos que dejaron su huella en la comarca,
hasta la Edad Media con sus historias de resistencia y comercio, el ataque de los franceses y el patrimonio oral que las familias han conservado durante genera-
ciones. Cada bodega, cada pueblo, tiene una historia que contar, y yo quería ser su voz.
Así nació Valdeorras es Vino y las VINRUTAS, mi producto estrella. Son experiencias organizadas que combinan paisaje, historia y viticultura, una manera de sumergirse en el alma de esta región.
Trabajamos con agencias de viajes y pasajeros individuales para ofrecer estas actividades a visitantes de todo el mundo.
Mi objetivo ahora es llevar estas historias aún más lejos, dar a conocer nuestra tierra y su legado de una manera global. Creo firmemente que el vino no es solo una bebida, es cultura, es historia, es tradición. Y contar esas historias, conectarlas con las personas, es mi mayor pasión.
Porque al final, lo que queda no es solo el sabor del vino, sino las memorias que construimos al compartirlo.